lunes, 17 de octubre de 2011
Volvemos al Desierto de las Palmas
Ha sido una sorpresa comprobar cómo la entrada que realicé hace aproximadamente un año acerca del Desierto de las Palmas, ha sido una de las más visitadas. Por eso, aprovechando que este verano me he pasado por allí, os presento algunas de las nuevas imágenes que he recogido.
En realidad no se trata de ningún desierto. Fueron los Carmelitas Descalzos quienes lo denominaron así, aludiendo al lugar de retiro y oración que para ellos suponía este paraje, donde fundaron el Monasterio Viejo, actualmente abandonado y destruido, y actualmente el Nuevo, en el que residen. En cuanto a lo de las Palmas, pues tampoco tiene nada que ver con las Palmeras, sino que se refiere al Palmito, una especie muy abundamte en la zona.
Este Parque Natural está situado en el municipio castellonense de Benicassim, y he visto allí a grupos laicos también dedicados a la espiritualidad, pero desde otros enfoques.
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Acabo de conocer tu blog y como era la primera vez no me he limitado a quedarme en esta entrada.
ResponderEliminarHe ido poco a poco recorriendo las anteriores entradas.
Te diré que lo que me ha llamado más mi atención ha sido tu reportaje del palacio de Viana y de los patios de Córdoba.
He visto que has visitado mi tierra y quizás hayamos coincidido sacando fotos en los patios.
Espero que tu estancia en Córdoba te resultara agradable.
Ha sido todo un placer conocerte.
http://ventanadefoto.blogspot.com/
Los monjes siempre eligen los mejores parajes para construir sus monasterios. No he conocido ninguno que no se encuentre en un lugar privilegiado.
ResponderEliminarSaludos
Interesante entrada. No conocía este lugar y me ha gustado mucho. Desde luego me parece estupendo para liberar en él el espíritu.
ResponderEliminarMuy buenas las fotos.
Un abrazo.
Ventana de foto: si hay algún sitio al que deseo volver, ése es Córdoba. Es una ciudad que me tiene encandilado.
ResponderEliminarDespistado: estoy al cien por cien de acuerdo con lo que dices. Los monges siempre eligen lugares muy especiales.
Gloria: verdaderamente, quién pudiera pasar una larga temporada en un sitio así dedicado a la vida contemplativa.
Gracias a todos por vuestra visita y comentarios, que espero que no sean los últimos.