Nos muestras una buena fusión entre la obra humana y la naturaleza con esas veladuras en los horizontes que contribuyen a crear ese ambiente mágico de misterio. Un abrazo,
Eso mismo me pareció a mi cuando lo vi en medio del bosque aparentemente en estado salvaje pero dotado de un encanto propio de una aparición mágica. Gracias por el comentario y un saludo.
Carlos, se me estan poniendo los dientes largos, que ganas de ir tengo, Tus fotos son preciosas.
ResponderEliminarExtraordinárias imágenes. Me encanta el Baztan y Elizondo con el rio, en particular.
ResponderEliminarUn abrazo Carlos
Además del paisaje que ya es bastante mágico, el procesado lo hace más todavía.
ResponderEliminarUn abrazo Carlos
La magia de estas fotos, hacen sentir deseos de ir allí. Hay muchos tesoros esconcidos, en nuestro país.
ResponderEliminarBesos
Uno de los sitios que tengo pendiente de visitar y mira que lo tenemos cerca. Tus fotos me hacen recordarlo.
ResponderEliminarTu miniserie es variada y mágica, como el lugar.
Abrazo.
Paisajes casi mágicos, desbordados por
ResponderEliminarla Naturaleza, bien conservados, y
donde el paso del tiempo es lento.
Estupendas fotografías.
Abrazos.
Nos muestras una buena fusión entre la obra humana y la naturaleza con esas veladuras en los horizontes que contribuyen a crear ese ambiente mágico de misterio.
ResponderEliminarUn abrazo,
Muchas gracias por la visita y comentario, a los amigos Ana, josep, Fernando, Antonia, Enrique, Angel y Miguel.
ResponderEliminarHola Carlos, por aquí estoy comenzando una nueva temporada. Bonitos paisajes has fotografiado, sabiendo muy bien buscar los encuadres.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias, Jesús. Un abrazo.
ResponderEliminarLa del cababllo parece la foto de un sueño.
ResponderEliminarSaludos.
Eso mismo me pareció a mi cuando lo vi en medio del bosque aparentemente en estado salvaje pero dotado de un encanto propio de una aparición mágica. Gracias por el comentario y un saludo.
EliminarQué maravilla. Y qué ganas de subir y recorrer tremendos rincones. Gracias por el regalo visual entre onírico y vivaz.
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