Una fotografía, conceptual, abierta a un dialogo, en un retrato de corrientes culturales y estéticas de una sociedad contemporánea. Espléndido retrato. Saludos.
Impresiona ya a primera vista, pero una vez analizada detenidamente despierta una infinidad de sensaciones... lo que más me llama la atención es la diferente expresión de cada ojo, el verde me intimida, el rojo me causa temor. Un buen trabajo, Anaximandro !!! Abrazos.
Un retrato que impresiona y que, al menos a mi, me lleva a pensar que hace que los hombres tratemos de cambiar nuestra apariencia de ese modo. Un abrazo,
Bueno, bueno , llevo un rato mirando este retrato, el chico es un mapa de carreteras, que original look, siempre me he preguntado que pasaria si un chico de estas caracteristicas visuales cambia con el tiempo y se vuelve digamos "clásico", tendrá marcha atrás, ja,ja, bueno aparte bromas decirte que me parece un gran retrato y un gran trabajo, saludos amigo y feliz semana.
Te envidio, mi tema pendiente.
ResponderEliminarMagnífica.
Wow! Todo un tatuaje en vivo. Seguro que pasó por 13 Tattoo de mi último post, jeje
ResponderEliminarMuy buen retrato
Feliz martes
Una fotografía, conceptual, abierta a un dialogo,
ResponderEliminaren un retrato de corrientes culturales y estéticas
de una sociedad contemporánea.
Espléndido retrato.
Saludos.
¡Caray! impresiona el retrato. ¿Los ojos están retocados o los tenía también así, de colores?
ResponderEliminarSalu2
Buen retrato con un mas que peculiar protagonista.
ResponderEliminarabrazos
Agustín
Well is it not Ragnar Lothbrok??It could be!!Very nice!!Greetings Anita
ResponderEliminarJaja. No, Anita, is not Ragnar Lothbrok. It' just an fan to tattoo.
EliminarGreetings.
Impresiona ya a primera vista, pero una vez analizada detenidamente despierta una infinidad de sensaciones... lo que más me llama la atención es la diferente expresión de cada ojo, el verde me intimida, el rojo me causa temor.
ResponderEliminarUn buen trabajo, Anaximandro !!!
Abrazos.
Extraordinária definición. El lado cálido y el lado frio de la cara, otro acierto.
ResponderEliminarUn abrazo Carlos
Bien visto, josep. Es lo que quería transmitir: sus dos caras pese a tener una apariencia uniforme.
EliminarMuchas gracias por la visita y comentario, a los amigos Luis, César, Angel, Juan Carlos, Agustín, Anita, Pili y josep.
ResponderEliminarUn retrato que impresiona y que, al menos a mi, me lleva a pensar que hace que los hombres tratemos de cambiar nuestra apariencia de ese modo.
ResponderEliminarUn abrazo,
Impresionante !!!
ResponderEliminarTodos llevamos nuestras marcas y señales, solo que unos las hacen más visibles que otros ;-)
Un abrazo, Carlos.
Buen retrato, con un plano muy acertado para mostrarnos ese rostro con todo detalle, al tiempo de dotarle de un gran significado.
ResponderEliminarSaludos.
Bueno, bueno , llevo un rato mirando este retrato, el chico es un mapa de carreteras, que original look, siempre me he preguntado que pasaria si un chico de estas caracteristicas visuales cambia con el tiempo y se vuelve digamos "clásico", tendrá marcha atrás, ja,ja, bueno aparte bromas decirte que me parece un gran retrato y un gran trabajo, saludos amigo y feliz semana.
ResponderEliminarTe decía que da yuyu mirarle a los ojos, ufff, qué cosa.
ResponderEliminarUn retrato que desde luego no pasa indiferente.
Abrazo.
Desde luego el mozo se las trae, sin duda es un buen reclamo fotográfico al que veo que no te has podido resistir.
ResponderEliminarNo estoy muy puesto en tatoos, pero la esclerótica de colorines me llama especialmente la atención.
Salvo algún aspecto técnico, me gusta cómo lo has encuadrado y su expresión, buen trabajo en ese sentido :))
Un abrazo Carlos.
Miguel, Emiliano, Jesús, jesus, Enrique y Minimal: gracias por vuestro tiempo y comentario.
ResponderEliminarComo que da un poco de yuyu, no? Buen retrato, Carlos!
ResponderEliminarUn abrazo.
Madre mía. Eso es moral. Al anochecer verlo, y salir corriendo. Buen retrato!!
ResponderEliminarBesos.
Uff, el chico impone. Pero el retrato es magnífico.
ResponderEliminarUn saludo amigo
Gracias por el comentario, Marco.
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